Hace ya más de veinte años que el Border Collie es considerado como el perro más inteligente de todas ls razas. Esto se debe al estudio de Stanley Coren, realizado en 1995, en que analizaba las respuestas de doscientos jueces de nada menos que el AKC.
Según este estudio, el Border COllie aprende nuevas órdenes con solo cinco repeticiones, siempre que se le enseñe correctamente, y es uno de los perros más leales y obedientes, además de un campeón natural en los torneos de agility.
Pero todo esto tiene su lado negativo: inteligencia y energía pueden ser una bomba muy peligrosa si no van unidos y bien cimentados con el correcto adiestramiento.
El problema aquí es el siguiente: la mayoría de las razas fueron hechas con un objetivo, un trabajo, y al quitarles ese trabajo se quedan con una necesidad y una energía que suplir y gastar.
El Border Collie es un perro pastor, hecho para correr junto al rebaño, protegerlo, guiarlo. Es resistente, muy veloz, e increíblemente fiel a su pastor (su humano).
¿Qué pasa cuando le quitas su trabajo? SU gran intelecto pierde motivación, ya no tiene una tarea y se aburre. Nada peor que un perro aburrido… sobre todo si es tan enérgico y listo como este.
Entonces, ¿qué debes hacer?
- No dejes de proveerle ejercicio en abundancia. TIene mucha energía y necesidad de gastarla. pOr tanto, paseos, juegos e incluso circuitos de agility dentro de casa (con los muebles que ya tienes).
- EN ausencia de un trabajo y una función, el BOrder COllie necesita alguna clase de tarea o estímulo mental que lo mantenga activo y concentrado. En este punto, tu mejor opción es el adiestramiento, ya que no solo te permitirá enseñarle trucos e instrucciones, sino que se divertirá y se sentirá estimulado por tu dirección. En su mente, aprender y obedecer significará que te ayuda. ¿Lo mejor? Solo necesitas diez minutos al día para educar a un perro. ¡Ya ves!
Como ves, no es tan difícil darle a tu perro una vida sana y saludable donde se sienta pleno y feliz… y siendo tan inteligente, te prometo que va a ser una experiencia inolvidable y única.
Marcos Mendoza